“‘Mi
reino no es de este mundo –dijo: si de este mundo fuera mi reino, mis
servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos: ahora, pues, mi reino no es de aquí. Díjole
entonces Pilato: ¿Luego rey eres tú?
Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, y para esto he venido
al mundo, para dar testimonio a
la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz’” (El
Deseado de Todas las Gentes, pág. 675).
EL REY DE GLORIA SE REVESTIÓ DE HUMANIDAD Y
SE CONVIERTE EN SIERVO
1. ¿Cómo reveló el Rey de gloria su amor por la
humanidad caída? Filipenses
2:5-8.
Haya,
pues, en vosotros este sentir que hubo
también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no
estimó el ser igual a Dios como cosa
a que aferrarse, sino que se
despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los
hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose
obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
“Desde su elevada posición, Cristo, el Rey de gloria, la Majestad de los cielos, vio la condición de los hombres. Tuvo compasión de los seres humanos,
débiles y pecadores, y vino a la
tierra para mostrar lo que Dios es para el hombre. Dejando su corte real, revistiendo
su divinidad con los velos de la humanidad, vino personalmente al mundo para labrar en nuestro favor un
carácter perfecto. No eligió morada
entre los ricos de la tierra” (Joyas de los Testimonios, tomo 3, pág.
383).
“El Rey de gloria se rebajó a revestirse
de humanidad. Tosco y repelente
fue el ambiente que le rodeó en la tierra. Su gloria se veló para que la
majestad de su persona no fuese objeto de atracción. Rehuyó toda ostentación externa. Las riquezas, la honra mundanal y la grandeza humana no pueden salvar a
una sola alma de la muerte; Jesús se propuso que ningún halago de índole
terrenal atrajera a los hombres a su lado” (El Deseado de Todas las Gentes, pág. 29).
2.
Como
hombre, ¿en qué se convirtió el Rey de gloria? Mateo 20:28; Lucas 22:27; Juan 13:4, 5.
Como el
Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para
servir, y para dar su vida en rescate por muchos. Porque, ¿cuál es mayor, el que se sienta a la mesa,
o el que sirve? ¿No es el que se
sienta a la mesa? Más yo
estoy entre vosotros como el que sirve. Se levantó de la cena, y se quitó su manto, y tomando una toalla, se la ciñó. Luego puso agua en un
lebrillo, y comenzó a lavar los pies
de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba ceñido.
“‘El que es el mayor de vosotros, sea
vuestro siervo. Porque el que
se ensalzare, será humillado; y el
que se humillare, será ensalzado.’ Repetidas veces Cristo había enseñado
que la verdadera grandeza se mide por el
valor moral. En la estima del cielo,
la grandeza de carácter consiste en
vivir para el bienestar de nuestros semejantes, en hacer obras de amor y misericordia. Cristo, el Rey de gloria, fue siervo del hombre caído.…
“Poniendo a
un lado el manto exterior que habría impedido sus movimientos, tomó una toalla
y se ciñó. Con sorprendido interés, los discípulos miraban, y en silencio
esperaban para ver lo que iba a seguir. ‘Luego puso agua en un lebrillo, y
comenzó a lavar los pies de los discípulos, y a limpiarlos con la toalla con
que estaba ceñido.’…
“Tenía plena conciencia de su divinidad;
pero había puesto a un lado su corona y
vestiduras reales, y había tomado forma de siervo. Uno de los
últimos actos de su vida en la tierra consistió en ceñirse como siervo y
cumplir la tarea de un siervo” (El Deseado de Todas las Gentes, págs. 565,
600, 601).
RECONOCIDO POR ALGUNOS Y DESPRECIADO POR
OTROS
3. ¿En qué ocasión fue Jesús reconocido como Rey
de gloria y por quién? Lucas
19:37, 38; Mateo 21:5; Marcos 11:9, 10.
Cuando llegaban
ya cerca de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, gozándose, comenzó a
alabar a Dios a grandes voces por todas
las maravillas que habían visto, diciendo: ¡Bendito el rey que viene en el nombre del Señor; paz en el cielo, y
gloria en las alturas!. Decid a la hija de Sion: He
aquí, tu Rey viene a ti, Manso, y sentado sobre una asna, Sobre un
pollino, hijo de animal de carga. Y los que iban delante y los que
venían detrás daban voces, diciendo: ¡Hosanna!
¡Bendito el que viene en el nombre
del Señor! ¡Bendito el reino
de nuestro padre David que viene! ¡Hosanna en las alturas!
“El que siempre había rechazado los honores
reales iba a entrar en Jerusalén como el prometido heredero del trono…
“Nunca antes había visto el mundo tal
escena de triunfo.…
“Los ciegos a quienes había restaurado la
vista abrían la marcha. Los
mudos cuya lengua Él había desatado voceaban las más sonoras alabanzas.
Los cojos a quienes había sanado
saltaban de gozo y eran los más activos en arrancar palmas para hacerlas ondear
delante del Salvador. Las
viudas y los huérfanos ensalzaban el nombre de Jesús por sus
misericordiosas obras para con ellos. Los
leprosos a quienes había limpiado extendían a su paso sus inmaculados vestidos
y le saludaban Rey de gloria. Aquellos
a quienes su voz había despertado del sueño de la muerte estaban en la multitud.
Lázaro, cuyo cuerpo se había
corrompido en el sepulcro, pero que ahora se gozaba en la fuerza de una
gloriosa virilidad, guiaba a la bestia en la cual cabalgaba el Salvador” (El
Deseado de Todas las Gentes, págs. 523, 526).
4.
¿Qué
contestó Jesús cuando Pilato le preguntó si era un rey? Juan 18:33, 36, 37.
Entonces Pilato
volvió a entrar en el pretorio, y llamó a Jesús y le dijo: ¿Eres tú el Rey de los judíos? Respondió Jesús: Mi
reino no es de este mundo; si mi
reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera
entregado a los judíos; pero mi
reino no es de aquí. Le dijo entonces Pilato: ¿Luego, eres tú
rey? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, y para esto he
venido al mundo, para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de
la verdad, oye mi voz.
“Jesús no respondió directamente a esta
pregunta.… “Aunque no contestó directamente la pregunta de Pilato, expuso claramente su propia misión.
Le dio a entender que no estaba buscando
un trono terrenal.…
“‘Díjole
entonces Pilato: ¿Luego rey eres tú? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey.
Yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo, para dar testimonio a
la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz.’ “Cristo afirmó que su palabra era en si misma una llave que abriría
el misterio para aquellos que estuviesen preparados para recibirlo.
Esta palabra tenía un poder que la recomendaba, y en ello estribaba el secreto
de la difusión de su reino de verdad” (El Deseado de Todas las Gentes, págs. 674,
675).
EL REY DE GLORIA REGRESA AL CIELO
5. Después de su ascensión al cielo, ¿cómo fue
recibido Jesús como Rey de gloria? Juan 16:28; Salmo 24:7-10.
Salí del
Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre.
Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará
el Rey de gloria. ¿Quién es
este Rey de gloria? Jehová el
fuerte y valiente, Jehová el poderoso en batalla. Alzad, oh puertas, vuestras
cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará el Rey de gloria. ¿Quién
es este Rey de gloria? Jehová de los
ejércitos, El es el Rey de la gloria. Selah.
“Cristo vino a la tierra como Dios en
forma humana. Ascendió a los
cielos como Rey de los santos. Su
ascensión fue digna de su exaltado carácter. Fue como alguien poderoso en batalla, vencedor, que llevaba cautiva
la cautividad. Fue acompañado
por la hueste angélica, entre aclamaciones de alabanza e himnos celestiales”
(La
Maravillosa Gracia, pág. 49).
“Cuando Cristo entró por los portales
celestiales, fue entronizado
en medio de la adoración de los ángeles. Tan pronto como esta ceremonia hubo terminado, el Espíritu Santo descendió sobre los discípulos en abundantes raudales,
y Cristo fue de veras glorificado con
la misma gloria que había tenido con el Padre, desde toda la eternidad”
(Los
Hechos de los Apóstoles, pág. 32).
EL REY DE GLORIA REGRESARÁ
6.
¿Cómo
regresará a la tierra por segunda vez el Rey de gloria? Apocalipsis 19:11, 16.
Entonces vi el
cielo abierto; y he aquí un
caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. Y en
su vestidura y en su muslo tiene escrito
este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR
DE SEÑORES.
“Entonces
vi que Jesús se despojaba de sus
vestiduras sacerdotales y se revestía de sus más regias galas. Llevaba en la cabeza muchas coronas, una
corona dentro de otra. Rodeado
de la hueste angélica, dejó el cielo.…
“Su corona era gloriosa y resplandeciente.
Estaba formada por una corona dentro de
otra corona, hasta un total de
siete” (Primeros Escritos, págs. 280, 281, 53).
“Cuando Cristo vuelva a la tierra, los hombres no
le verán como preso rodeado por una turba. Le verán como Rey del cielo. Cristo volverá en su gloria, en la gloria de su Padre y en la gloria de los santos ángeles. Miríadas y miríadas, y miles
de miles de ángeles, hermosos y
triunfantes hijos de Dios que poseen una belleza y gloria superiores a todo
lo que conocemos, le escoltarán en su
regreso. Entonces se sentará
sobre el trono de su gloria y delante de Él se congregarán todas las naciones.
Entonces todo ojo le verá y también
los que le traspasaron. En lugar
de una corona de espinas, llevará una corona de gloria, una corona
dentro de otra corona. En lugar de aquel viejo manto de grana, llevará un vestido del blanco más puro,
‘tanto que ningún lavador en la tierra los puede hacer tan blancos.’ Y
en su vestidura y en su muslo estará escrito un nombre: ‘Rey de reyes y Señor
de señores’” (DTG, pág. 688).
7.
¿Cuál será
el privilegio de los redimidos en ocasión de la segunda venida del Rey de
gloria? Mateo 25:31-34; 16:27;
Apocalipsis 22:12.
Cuando el Hijo
del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él,
entonces se sentará en su trono de
gloria, y serán reunidas delante
de él todas las naciones; y apartarálos
unos de los otros, como aparta el
pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos
a su izquierda. Entonces el Rey
dirá a los de su derecha: Venid,
benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la
fundación del mundo. Porque el
Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces
pagará a cada uno conforme a sus obras. He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a
cada uno según sea su obra.
“Pero cuando venga Jesús, concederá la
inmortalidad a su pueblo; y luego
los llamará a poseer el reino, del que hasta aquí sólo han sido
presuntos herederos.…
“‘El reino, y el señorío y la majestad de los
reinos debajo de todo el cielo’ van a ser dados a los herederos de la salvación
y Jesús va a reinar como Rey de reyes y
Señor de señores.…
“Dicha indecible estremece todos los
corazones, y cada voz se eleva en
alabanzas de agradecimiento. ‘Al
que nos amó, y nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre, y nos ha hecho
reyes y sacerdotes para Dios y su Padre; a Él sea gloria e imperio para siempre jamás.’ (Apocalipsis
1:5, 6.)
“Luego se oye aquella voz, más armoniosa que
cualquier música que haya acariciado jamás el oído de los hombres, y que
dice: ‘Vuestro conflicto ha terminado.’ ‘Venid, benditos de mi Padre, heredad
el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo’” (El
Conflicto de los Siglos, págs. 369, 671, 704).
MEDITACIÓN
“En aquel día
los redimidos resplandecerán en la gloria del Padre y del Hijo. Tocando sus arpas de oro, los ángeles darán la bienvenida al Rey y a
los trofeos de su victoria: los que fueron
lavados y emblanquecidos en la sangre del Cordero. Se elevará un canto de triunfo que llenará
todo el cielo. Cristo habrá vencido. Entrará en los atrios celestiales
acompañado por sus redimidos, testimonios de que su misión de sufrimiento y
sacrificio no fue en vano” (Joyas de los Testimonios, tomo 3, pág.
432).
ESTUDIO PERSONAL
“Allí estaba el Hijo de Dios, llevando el manto de burla
y la corona de espinas. Desnudo hasta la cintura, su espalda revelaba los
largos, y crueles azotes, de los cuales la sangre fluía copiosamente. Su rostro manchado de sangre llevaba
las marcas del agotamiento y el dolor; pero nunca había parecido más hermoso que en ese momento.… Cada rasgo expresaba bondad y
resignación y la más tierna compasión por sus crueles verdugos. Su porte no expresaba debilidad cobarde,
sino la fuerza y dignidad de la longanimidad” (El Deseado de Todas las Gentes,
pág. 684).
“Pronto presenciaremos la coronación de nuestro Rey. Aquellos
cuya vida quedó escondida con Cristo, aquellos que en esta tierra pelearon la
buena batalla de la fe, resplandecerán con la gloria del Redentor en el reino
de Dios” (Joyas de los Testimonios, tomo 3, pág. 434).
03 | El rey de gloria by Iglesia Trujillo
COMUNICADO: Debido a los problemas que presenta el servidor RAPIDSHARE para realizar las descargas, nos vimos obligados a buscar otra opción (MediaFire) para difundir las Lecciones de Escuela Sabática…
ResponderEliminarPASOS: Dar clic en la imagen (Descargar) y luego se nos presentará la interfaz de MediaFire… Ubicar en el centro de su pantalla un cuadro de color blanco con el nombre del archivo (Lección 03 - El rey de gloria.rar) y luego dar clic en el botón verde que dice descargar…
Bendiciones / FELIZ SÁBADO
Saludos desde Canadá para nuestros hermanos en Trujillo. Quiero agradecerles por el trabajo de las lecciones en PPT... son muy útiles y estamos empleando el material para la comunidad hispana que reune en nuestra iglesia. Una vez más ... muchas gracias y les animamos a que mantengan el ritmo en la elaboración del material para la gloria de Aquel que lo dió todo por nosotros.
ResponderEliminarElder Smith Hernández