“Vi volar por en medio del cielo
a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de
la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo” Apocalipsis 14:6.
MENSAJES DIVINOS
1.
¿Cuán significativos son los tres mensajes angélicos? Apocalipsis 14:6-12.
¿Qué protección ofrecen al pueblo de Dios en el tiempo del fin? Son muy
significativos.
Vi volar por en medio del cielo a otro
ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la
tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: Temed
a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a
aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. Otro
ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran
ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su
fornicación. Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran
voz: Si
alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su
mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha
sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre
delante de los santos ángeles y del Cordero; y el humo de su tormento sube
por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que
adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre. Aquí
está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la
fe de Jesús.
“Me
fueron mostrados tres escalones: los mensajes del primer ángel, del
segundo y del tercero. Dijo mi ángel acompañante. ‘¡Ay
de aquel que mueva un bloque o clavija de estos mensajes! La
verdadera comprensión de esos mensajes es de importancia vital. El
destino de las almas depende de la manera en que son recibidos.’
Nuevamente se me hizo recorrer esos mensajes, y vi a cuán alto precio había
obtenido su experiencia el pueblo de Dios. “Muchos percibieron el perfecto
eslabonamiento de verdades en los mensajes angélicos, y aceptándolos
gozosamente uno tras otro, siguieron al Señor por la fe en el
santuario celeste. Estos mensajes me fueron representados como un ÁNCORA (AUXILIO) para
el pueblo de Dios. Quienes los comprendan y acepten quedarán
libres de verse arrastrados por los muchos engaños de Satanás” (Primeros
Escritos, págs. 258, 259, 256).
2.
¿Por qué declaró la hna. Elena G. de White que debemos experimentar el
triple mensaje angélico? Mateo 7:26.
Pero cualquiera que me oye estas palabras y no
las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó
su casa sobre la arena.
“Muchos
de los que aceptaban el tercer mensaje no habían tenido experiencia en los dos anteriores.
Satanás comprendió esto, y fijó en ellos su ojo maligno para vencerlos; pero el
tercer ángel dirigía la atención de ellos hacia el lugar santísimo,
y los
que habían tenido experiencia en los mensajes anteriores les indicaban el
camino del santuario celestial. “Asimismo los que no tuvieron experiencia
en los mensajes del primer ángel y del segundo deben recibirlos de otros que
participaron en aquella experiencia y estuvieron al tanto de los
mensajes” (Primeros Escritos, págs. 256, 188).
3.
¿Qué proclama el primer ángel? Explica el primer mensaje angélico en
relación al movimiento adventista en el cual Guillermo Miller predicó que Jesús
regresaría a la tierra en la primavera de 1844. Apocalipsis 10:8, 9.
La voz que oí del cielo habló otra vez
conmigo, y dijo: Ve y toma el librito que está abierto en la mano del ángel que
está en pie sobre el mar y sobre la tierra. Y fui al ángel, diciéndole que me
diese el librito. Y él me dijo: Toma, y cómelo; y te
amargará el vientre, pero en tu boca será dulce como la miel.
“A
Guillermo
Miller y a sus colaboradores les fue encomendada la misión de predicar la
amonestación en los Estados Unidos de Norteamérica. Dicho país vino
a ser el centro del gran movimiento adventista. Allí fue donde la profecía del
mensaje del primer ángel tuvo su cumplimiento más directo… Por
todas partes fue predicado el mensaje del Evangelio eterno: ‘¡Temed
a Dios y dadle gloria; porque ha llegado la hora de su juicio!’ “El
testimonio de las profecías que parecían señalar la fecha de la venida de
Cristo para la primavera de 1844 se arraigó profundamente en la mente del
pueblo. Al pasar de un estado a otro, el mensaje despertaba vivo
interés por todas partes” (El Conflicto de los Siglos, pág. 417).
UNA EXPERIENCIA MARAVILLOSA
4.
De acuerdo a la experiencia de Jonás, ¿cuál fue la respuesta al mensaje de
la pronta venida de Jesús, tal como predicaban Miller y sus asociados? Apocalipsis
10:8, 9; Jonás 3:3-5.
La voz que oí del cielo habló otra vez
conmigo, y dijo: Ve y toma el librito que está abierto en la mano del ángel que está en
pie sobre el mar y sobre la tierra. Y fui al ángel, diciéndole que
me diese el librito. Y él me dijo: Toma, y cómelo; y te amargará el vientre,
pero en tu boca será dulce como la miel. Y se levantó Jonás, y fue a
Nínive conforme a la palabra de Jehová. Y era Nínive ciudad grande
en extremo, de tres días de camino. Y comenzó Jonás a entrar por la
ciudad, camino de un día, y predicaba diciendo: De aquí a cuarenta días Nínive
será destruida. Y los hombres de Nínive creyeron a Dios,
y proclamaron
ayuno, y se vistieron de cilicio desde el mayor hasta el menor de ellos.
“El
testimonio sencillo y directo de las Sagradas Escrituras, inculcado
en el corazón de los hombres por el poder del Espíritu Santo, producía
una fuerza de convicción a la que sólo pocos podían resistir” (El
Conflicto de los Siglos, pág. 418).
“Doquiera
se publicaba el mensaje, se conmovía el ánimo de la gente.
Los
pecadores se arrepentían, lloraban e impetraban perdón; y quienes
habían cometido algún hurto o desfalco, anhelaban restituir la substracción.
Los
padres sentían profundísima solicitud por sus hijos” (Primeros
Escritos, págs. 232, 233).
“Los
pecadores preguntaban llorando: ‘¿Qué debo yo hacer para ser salvo?’
Aquellos cuyas vidas se habían hecho notar por su mala fe, deseaban hacer
restituciones. Todos los que encontraban paz en Cristo ansiaban ver a otros
participar de la misma bendición. Los corazones de los padres se volvían
hacia sus hijos, y los corazones de los hijos hacia sus padres. Los
obstáculos levantados por el orgullo y la reserva desaparecían. Se
hacían sentidas confesiones y los miembros de la familia trabajaban por la
salvación de los más cercanos y más queridos. A menudo se oían
voces de ardiente intercesión. Por todas partes había almas que con angustia
luchaban con Dios. Muchos pasaban toda la noche en oración para tener la seguridad de que
sus propios pecados eran perdonados, o para obtener la conversión de sus
parientes o vecinos” (El Conflicto de los Siglos, págs. 418,
419).
5.
¿Cuán profundo y serio fue el arrepentimiento de las personas que aceptaron
la verdad conforme se acercaban al 22 de Marzo de 1844? Hechos 3:19.
Así que, arrepentíos y convertíos, para
que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la
presencia del Señor tiempos de refrigerio.
“Los
que habían aceptado el mensaje velaban por la venida de su Salvador con indecible
esperanza. El tiempo en que esperaban ir a su encuentro
estaba próximo. Y a esa hora se acercaban con solemne calma. Descansaban
en dulce comunión con Dios, y esto era para ellos prenda segura de la paz que
tendrían en la gloria venidera. Ninguno de los que abrigaron esa
esperanza y esa confianza pudo olvidar aquellas horas tan preciosas de
expectación. Pocas semanas antes del tiempo
determinado dejaron de lado la mayor parte de los negocios mundanos.
Los
creyentes sinceros examinaban cuidadosamente todos los pensamientos y emociones
de sus corazones como si estuviesen en el lecho de muerte y como si tuviesen
que cerrar pronto sus ojos a las cosas de este mundo” (El
Conflicto de los Siglos, pág. 423).
ARREPENTIMIENTO Y CONFESIÓN
6. ¿Cómo podemos, nosotros que vivimos un siglo y medio después, tener una
experiencia similar y profunda? Ezequiel 18:30, última parte; Apocalipsis 3:3;
Mateo 24:42.
Convertíos, y apartaos de todas vuestras
transgresiones, y no
os será la iniquidad causa de ruina. Acuérdate, pues, de lo que has
recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete. Pues si
no velas, vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti.
Velad,
pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
“Cristo
puede salvar hasta lo sumo a todos los que se acercan a Él con fe. Si se
lo permiten los limpiará de toda contaminación; pero si se
aferran a sus pecados no hay posibilidad de que sean salvos, pues la
justicia de Cristo no cubre los pecados por los cuales no ha habido
arrepentimiento” (Comentario Bíblico Adventista, tomo 7, pág. 942).
“Ningún
arrepentimiento que no obre una reforma es genuino. La
justicia de Cristo no es un manto para cubrir pecados que no han sido
confesados ni abandonados; es un principio de vida que transforma el
carácter y rige la conducta. La santidad es integridad para con Dios:
es la entrega total del corazón y la vida para que revelen los principios del
cielo” (Deseado Todas las Gentes, pág. 509).
“Josías
se humilló cuando oyó las palabras de amonestación y condenación
debido a que Israel había hollado los preceptos del cielo. Lloró delante del Señor;
realizó una obra completa de arrepentimiento y reforma, y Dios
aceptó sus esfuerzos. Toda la congregación de Israel se
comprometió en un pacto solemne de que guardaría los mandamientos de Jehová.
Esta
es nuestra obra hoy día. Debemos arrepentirnos del mal de nuestras obras pasadas, buscar a Dios de todo corazón” (CBA,
tomo 7, pág. 942).
7. Si continuamos acariciando pecados inconfesos, ¿podemos afirmar que
aceptamos el primer mensaje angélico? ¿Cuál será la consecuencia de ello? Salmo
66:18; Isaías 4:8.
Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, El Señor no me habría escuchado.
“Jesús
murió, no para salvar al hombre en sus pecados, sino de sus pecados.
El
hombre ha de abandonar el error de sus caminos, seguir el ejemplo de Cristo,
tomar su cruz y seguirlo, negándose a sí mismo y obedeciendo a Dios
a todo costo” (Joyas de los Testimonios, tomo 1, pág.
500).
“Si
se conserva un pecado en el alma, o se retiene una mala práctica en la vida,
todo el ser queda contaminado” (El Deseado de Todas las Gentes, págs. 279,
280).
8. El tercer ángel apuntaba hacia arriba, indicando a los santos el camino al
santuario celestial; y encontraron a Jesús en el lugar santísimo. ¿Podemos,
hoy, entrar en el lugar santísimo llevando pecados sin arrepentimiento en el
corazón? Levítico 21:23.
NO. Pero
no
se acercará tras el velo, ni se acercará al altar, por
cuanto hay defecto en él; para que no profane mi santuario, porque
yo Jehová soy el que los santifico.
“Vi
que el
tercer ángel señalaba hacia lo alto, indicando a los que habían
sido chasqueados el camino al lugar santísimo del santuario
celestial. Los que por fe entraban al lugar santísimo, hallaban a Jesús, y
resurgían en ellos la esperanza y el júbilo. Vi que volvían
los ojos hacia atrás, recapitulando el pasado, desde la
proclamación del segundo advenimiento de Jesús hasta la experiencia sufrida al
transcurrir la fecha de 1844. Vieron la explicación de su chasco,
y de
nuevo los alentó una gozosa certidumbre. El tercer ángel había
esclarecido el pasado, el presente y el porvenir, y ellos sabían
que en efecto Dios los había guiado con su misteriosa providencia. “Se
me mostró que el residuo siguió por la fe a Jesús en el lugar santísimo, y al
contemplar el arca y el propiciatorio, fue cautivado por su esplendor”
(Primeros
Escritos, pág. 255).
REPASO Y MEDITACIÓN
·
¿En qué sentido es el triple
mensaje angélico no una teoría sino una experiencia?
· ¿Qué experiencia siguió a la
proclamación del primer mensaje angélico en el siglo XIX?
·
Pregunta personal: ¿He aceptado
el primer mensaje angélico?
Lección 11 - El Primer Mensaje Angélico
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