miércoles, 21 de diciembre de 2011

26 | Siguiendo al verdadero pastor


“…Los que pretenden ser guiados por Dios, pero se apartan de Él y de su ley, no escudriñan las Escrituras. Pero el Señor conducirá a su pueblo; porque Él dice que  sus ovejas lo seguirán si oyeren su voz, pero que no seguirán a un extraño” (Fe y Obras, pág. 56).

LA VIDA DEL PASTOR
1.  ¿Qué usó el Señor para  ilustrar su ministerio en  favor del mundo? Juan 10:11, 14, primera parte.
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas.
De nuevo Jesús halló acceso a la mente de sus oyentes por medio de las cosas con las que estaban familiarizados. Había comparado la influencia del Espíritu al agua fresca, refrigerante. Se había representado por la luz, fuente de vida y alegría para la naturaleza y el hombre. Ahora, mediante un hermoso cuadro pastoril, representó su relación con los que creían en Él. Ningún cuadro era más familiar que éste para sus oyentes y las palabras de Cristo lo vincularon para siempre con Él mismo. Nunca mirarían los discípulos a los pastores que cuidasen sus rebaños sin recordar la lección del Salvador. Verían a Cristo en cada pastor fiel. Se verían a sí mismos en cada rebaño indefenso y dependiente” (El Deseado de Todas las Gentes, pág. 442).

2. ¿Cómo usaron los profetas la misma imagen para representar el cuidado amoroso de Dios por su pueblo? Salmo 23:1; Isaías 40:11. ¿A quiénes aplicó Jesús esta profecía?
Jehová es mi pastor; nada me faltará. Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas.
Cristo aplicó estas profecías a sí mismo, y mostró el contraste que había entre su carácter y el de los dirigentes de Israel. Los fariseos acababan de echar a uno del redil porque había osado testificar del poder de Cristo. Habían excomulgado a un alma a la cual el verdadero  Pastor estaba atrayendo. Así habían demostrado que desconocían la obra a ellos encomendada, y que eran indignos del cargo de pastores del rebaño. Jesús les presentó el contraste que existía entre ellos y el buen Pastor, y se declaró el verdadero guardián del rebaño del Señor. Antes de hacerlo, sin embargo, habló de sí mismo empleando otra figura” (El Deseado de Todas las Gentes, págs. 442, 443).

EL REGALO DEL VERDADERO PASTOR AL HOMBRE
3.   En contraste con las ceremonias y sistemas de los hombres, ¿cómo se entra en el redil eterno y celestial?  Juan 10:9, 1, 2.
Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. De cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteadorMás el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es
Cristo es la puerta del redil de Dios. Por esta puerta todos sus hijos, desde los más remotos tiempos, han hallado entrada. En Jesús, como estaba presentado en los tipos, prefigurado en los símbolos, manifestado en la revelación de los profetas, revelado en las lecciones dadas a sus discípulos, y en los milagros obrados en favor de los hijos de los hombres, ellos han contemplado al ‘Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo,’ y por Él son introducidos en el redil de su gracia. Se han presentado muchos otros objetos de fe en el mundo; se han ideado ceremonias y sistemas por los cuales los hombres esperan recibir justificación y paz para con Dios, y hallar así entrada en su redil. Pero la única puerta es Cristo, y todos los que han interpuesto alguna otra cosa para que ocupe el lugar de Cristo, todos los que han procurado entrar en el redil de alguna otra manera, son ladrones y robadores
“Durante todos los siglos, los filósofos y maestros han estado presentando al mundo teorías para satisfacer la necesidad del alma…. Cristo vino para crear de nuevo en el hombre la imagen de Dios; y cualquiera que aleje a los hombres de Cristo los aleja de la fuente del verdadero desarrollo; los despoja de la esperanza, el propósito y la gloria de la vida. Es ladrón y robador” (D.T.G., págs. 443, 444).

4.   ¿Qué hace el verdadero Pastor además de proveer alimento y agua a las ovejas? Juan 10:10. ¿Por qué el Señor representa a su pueblo  como un rebaño de ovejas? 
El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia
De todas las criaturas, la oveja es una de las más tímidas e indefensas, y en el Oriente el cuidado del pastor por su rebaño es incansable e incesante. Antiguamente, como ahora, había poca seguridad fuera de las ciudades amuralladas. Los merodeadores de las tribus errantes, o las bestias feroces que tenían sus guaridas entre las rocas, acechaban para saquear los rebaños. El pastor velaba por su rebaño, sabiendo que lo hacía con peligro de su propia vida. Jacob, que cuidaba los rebaños de Labán en los campos de Harán, dice, describiendo su infatigable labor: ‘De día me consumía el calor, y de noche la helada, y el sueño se huía de mis ojos.’ Y fue mientras cuidaba las ovejas de su padre, cuando el joven David, sin ayuda, hacía frente al león y al oso, y arrebataba de entre sus colmillos el cordero robado.
“Mientras el pastor guía su rebaño por sobre las colinas rocosas, a través de los bosques y de las hondonadas desiertas, a los rincones cubiertos de pastos junto a la ribera de los ríos; mientras lo cuida en las montañas durante las noches solitarias, lo protege de los ladrones y con ternura atiende a las enfermizas y débiles, su vida se unifica con la de sus ovejas. Un fuerte lazo de cariño lo une a los objetos de su cuidado. Por grande que sea su rebaño, Él conoce cada oveja. Cada una tiene su nombre, al cual responde cuando la llama el pastor” (El Deseado de Todas las Gentes, págs. 444, 445).

5.   ¿Cuán íntima es la relación entre las ovejas y el Pastor? Juan 10:14, 15; Isaías 43:1.
Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. 
Como un pastor terrenal conoce sus ovejas, así el divino Pastor conoce su rebaño, esparcido por el mundo. ‘Y vosotras, ovejas mías, ovejas de mi pasto, hombres sois, y yo vuestro Dios, dice el Señor Jehová.’ Jesús dice: ‘Te puse nombre, mío eres tú.’ ‘He aquí que en las palmas te tengo esculpida.’
Jesús nos conoce individualmente, y se conmueve por el sentimiento de nuestras flaquezas. Nos conoce a todos por nombre. Conoce la casa en que vivimos, y el nombre de cada ocupante. Dio a veces instrucciones a sus siervos para que fueran a cierta calle en cierta ciudad, a tal casa, para hallar a una de sus ovejas” (El Deseado de Todas las Gentes, pág. 445).

OIDORES Y SEGUIDORES
6.   ¿Qué dijo Jesús sobre sus ovejas? ¿Qué hacen? Juan 10:3, 2da. parte, 27; Apocalipsis 14:4, 2da. parte. Pregunta personal: ¿Sigues tú al buen Pastor?
Y a sus ovejas llama por nombre, y las saca. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero
“Cada alma es tan plenamente conocida por Jesús como si fuera la única por la cual el Salvador murió. Las penas de cada uno conmueven su corazón. El clamor por auxilio penetra en su oído. El vino para atraer a todos los hombres a sí. Los invita: ‘Seguidme,’ y su Espíritu obra en sus corazones para inducirlos a venir a Él. Muchos rehúsan ser atraídos.
Jesús conoce quiénes son. Sabe también quiénes oyen alegremente su llamamiento y están listos para colocarse bajo su cuidado pastoral… Cuida a cada una como si no hubiera otra sobre la haz de la tierra
Aunque ascendió a la presencia de Dios y comparte el trono del universo, Jesús no ha perdido nada de su naturaleza compasiva. Hoy el mismo tierno y simpatizante corazón está abierto a todos los pesares de la humanidad. Hoy las manos que fueron horadadas se extienden para bendecir abundantemente a su pueblo que está en el mundo. ‘No perecerán para siempre, ni nadie las arrebatará de mi mano.’ El alma que se ha entregado a Cristo es más preciosa a sus ojos que el mundo entero. El Salvador habría pasado por la agonía del Calvario para que uno solo pudiera salvarse en su reino. Nunca abandona a un alma por la cual murió. A menos que sus seguidores escojan abandonarle, Él los sostendrá siempre” (El Deseado de Todas las Gentes, págs. 445, 446).

7.   ¿Qué dijo Jesús sobre otras ovejas que no estaban en su redil?  ¿Qué iba a hacer Él por sus ovejas? Juan 10:16, 17; 11:51, 52.
También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor. Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación; y no solamente por la nación, sino también para congregar en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos
Las ovejas perdidas del redil de Dios están esparcidas por todo lugar, y se está descuidando la obra que tendría que hacerse en su favor. Por la luz recibida, sé que debiera haber cien colportores donde hay uno. Debería animarse a los colportores a hacer esta clase de obra; no a vender libros con historias, sino a presentar al mundo los libros que contienen la verdad más importante para este tiempo” (Testimonios para la Iglesia, tomo 6, pág. 317).

PARA MEDITAR
“Pero, por otro lado, cuando la  tormenta de la persecución  caiga  realmente sobre nosotros, las ovejas fieles escucharán la voz del Pastor verdadero. Se harán esfuerzos desinteresados para salvar a los perdidos, y muchos que han dejado el redil, regresarán para ir en pos del gran Pastor” (Testimonios para la Iglesia, tomo 6, pág. 400).

PARA UN ESTUDIO ADICIONAL: Mateo 18:11-14; Obreros Evangélicos, págs. 190-193; Consejos para Maestros, Padres y Alumnos, págs. 247, 248.

Lección 26 - Siguiendo al verdadero pastor

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