“Con fe, la mujer de Fenicia se lanzó contra las barreras que habían sido acumuladas entre judíos y gentiles. A pesar del desaliento, sin prestar atención a las apariencias que podrían haberla inducido a dudar, confió en el amor del Salvador. Así es como Cristo desea que confiemos en él. Las bendiciones de la salvación son para cada alma. Nada, a no ser su propia elección, puede impedir a algún hombre que llegue a tener parte en la promesa hecha en Cristo por el Evangelio”. –El Deseado de Todas las Gentes, pág. 369.
LA SÚPLICA DE UNA MUJER CANANEA
1.....¿Quién imploró ayuda del Salvador en el área pagana que
hoy es el Líbano?
Mateo 15:21, 22.- (21) Saliendo Jesús de allí, se fue a la región de Tiro y de
Sidón. (22) Y he aquí una mujer cananea que
había salido de aquella región clamaba, diciéndole: ¡Señor, Hijo de
David, ten misericordia de mí! Mi hija es gravemente atormentada por
un demonio.
Marcos 7:24, 25.- (24) Levantándose de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón; y entrando
en una casa, no quiso que nadie lo supiese; pero no pudo esconderse.
(25) Porque una mujer, cuya hija tenía
un espíritu inmundo, luego que oyó de él, vino y se postró a sus pies.
“Los habitantes de esta región pertenecían a la antigua raza cananea.
Eran idólatras, despreciados y
odiados por los judíos. A esta
clase pertenecía la mujer que ahora había venido a Jesús. Era pagana, y por lo tanto estaba
excluida de las ventajas que los judíos disfrutaban diariamente. Había
muchos judíos que vivían entre los fenicios, y las noticias de la obra de
Cristo habían penetrado hasta esa región. Algunos de los habitantes habían
escuchado sus palabras, y habían presenciado sus obras maravillosas. Esta mujer había oído hablar del profeta,
quien, según se decía, sanaba toda clase
de enfermedades. Al oír hablar de
su poder, la esperanza había nacido en su corazón. Inspirada por su amor maternal, resolvió presentarle el caso de su
hija. Había resuelto llevar su
aflicción a Jesús. Él debía
sanar a su hija. Ella había
buscado ayuda en los dioses paganos, pero no la había obtenido. Y a veces se sentía tentada a pensar: ¿Qué
puede hacer por mí este maestro judío? Pero había llegado esta nueva: Sana toda clase de enfermedades, sean
pobres o ricos los que a él acudan por auxilio. Y decidió no perder su única esperanza.” –El Deseado de Todas
las Gentes, pág. 365.
PAGANA, PERO CREYENTE
2.....¿Cómo es posible explicar tal creencia en Jesús por
alguien en un país extranjero con una educación pagana? ¿Qué se sabe acerca de
los conocimientos sobre el Maestro divino desde el principio de su ministerio?
Mateo 4:23, 24.- (23) Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las
sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda
enfermedad y toda dolencia en el pueblo. (24) Y se difundió su fama por toda
Siria; y le trajeron todos los que tenían dolencias, los
afligidos por diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunáticos y
paralíticos; y los sanó.
Marcos 7:26.- La mujer era griega, y sirofenicia de
nación; y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio.
“La vida de Cristo fue de constante sacrificio propio. Su obra no estaba limitada a algún lugar o
tiempo. Estaba ligada sólo por el
amor y la simpatía que Jesús sentía por las almas por las cuales pronto
daría su vida. Su compasión no conocía
límites. Realizó su obra de curación
y enseñanza en tan grande escala, que no había edificio en Palestina lo suficientemente grande para albergar
las multitudes que lo rodeaban. En cada
ciudad y pueblo por donde pasaba se encontraba su hospital. En las laderas de las colinas de Galilea, en
las grandes vías públicas, en la costa del mar, en las sinagogas, en todo lugar
donde había corazones prestos a
escuchar su mensaje, Cristo
sanaba a las personas y les señalaba al Padre Celestial. Al atardecer, luego de la jornada de
labor, hablaba con los que durante el día trabajaban por una pitanza para
sostener a sus familias.” – Alza tus Ojos, pág. 328.
“Estas palabras dan
una ilustración de la manera en que Cristo cultivaba el suelo del corazón.
Señalan claramente el trabajo que tenemos que hacer, no en un lugar solamente,
sino en todo lugar.’” –Review and Herald, 30 de marzo de 1905.
NINGUNA RESPUESTA INMEDIATA
3.....¿Respondió el Señor inmediatamente la petición de esta
madre por su hija? Pensando que Jesús no tenía ningún interés en su caso, ¿qué
le pidieron los discípulos a Jesús que hiciera?
Mateo 15:23.- Pero Jesús no le respondió palabra.
Entonces acercándose sus discípulos, le rogaron, diciendo: Despídela,
pues da voces tras nosotros.
“Cristo conocía la situación de esta mujer. Él sabía que ella anhelaba verle, y se
colocó en su camino. Ayudándola
en su aflicción, él podía dar una representación viva de la lección que quería
enseñar. Para esto había traído
a sus discípulos. Deseaba que
ellos viesen la ignorancia existente en las ciudades y aldeas cercanas a la
tierra de Israel. El pueblo al cual había sido dada toda oportunidad de
comprender la verdad no conocía las necesidades de aquellos que le rodeaban… “Cristo no respondió inmediatamente a la
petición de la mujer. Recibió a
esta representante de una raza despreciada como la habrían recibido los judíos.
Con ello quería que sus discípulos
notasen la manera fría y despiadada con que los judíos tratarían un caso tal
evidenciándola en su recepción de la mujer, y la manera compasiva con que quería que ellos tratasen una angustia
tal, según la manifestó en la subsiguiente concesión de lo pedido por
ella.” –El Deseado de Todas las Gentes, pág. 366.
4.....¿Qué le dijo primero a la mujer? ¿En qué ocasión dijo
algo similar?
Mateo 15:24.- El respondiendo, dijo: No soy
enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.
Mateo 10:5, 6.- (5) A estos doce envió Jesús, y les dio
instrucciones, diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en
ciudad de samaritanos no entréis, (6) sino id antes a las ovejas
perdidas de la casa de Israel.
“Pero aunque Jesús no respondió, la mujer no perdió su fe. Mientras él obraba como si no la hubiese
oído, ella le siguió y continuó
suplicándole. Molestados por su
importunidad, los discípulos pidieron a Jesús que la despidiera. Veían que su Maestro la trataba con indiferencia
y, por lo tanto, suponían que le agradaba el prejuicio de los judíos contra los
cananeos. Mas era a un Salvador compasivo a quien la mujer dirigía su
súplica, y en respuesta a la petición de los discípulos, Jesús dijo: “No soy
enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.” Aunque esta respuesta parecía estar de
acuerdo con el prejuicio de los judíos, era una reprensión implícita para los discípulos, quienes la entendieron más tarde como
destinada a recordarles lo que él les
había dicho con frecuencia, a saber, que había venido al mundo para salvar a
todos los que querían aceptarle.” –El Deseado de Todas las Gentes, pág.
366.
FERVOR Y SÚPLICA AUMENTADA
5.....¿Se dio por vencida la madre cuando escuchó esto? ¿Con
qué sincera devoción repitió su petición?
Mateo 15:25.- Entonces ella vino y se postró ante él,
diciendo: ¡Señor, socórreme!
“La mujer presentaba su caso con instancia y creciente fervor,
postrándose a los pies de Cristo
y clamando: ‘Señor, socórreme.’”
–El Deseado de Todas las Gentes, pág. 367.
“Cuando te desanimes, no dependas de seres humanos para ayuda.
Cristo declara, ‘el Consolador estará con vosotros.’
Id a Dios en oración. Póstrate delante de él y dile, ‘Señor,
ayúdame; porque estoy en dificultad y no sé qué hacer. Tú has prometido darles a tus hijos lo que pidan en tú nombre.
Pedimos fortaleza para resistir las
tentaciones del enemigo.’” –The Gospel Herald, 1 marzo de 1901.
PROBANDO LA FE DE LA PETICIONARIA
6.....En relación con otros mensajes, ¿cómo hemos de entender la
segunda declaración de Jesús a esta mujer?
Mateo 15:26.- Respondiendo él, dijo: No está
bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos.
Marcos 7:27.- Pero Jesús le dijo: Deja primero
que se sacien los hijos, porque no está bien tomar el pan de los
hijos y echarlo a los perrillos.
Lucas 18:1.- También les refirió Jesús una parábola
sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar.
Romanos 12:12.- Gozosos en la esperanza; sufridos
en la tribulación; constantes en la oración.
“Jesús, aparentando todavía rechazar sus súplicas, según el prejuicio despiadado de los
judíos, contestó: “No es bien
tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos.” Esto era virtualmente aseverar que no era
justo conceder a los extranjeros y enemigos de Israel las bendiciones traídas
al pueblo favorecido de Dios. Esta
respuesta habría desanimado completamente a una suplicante menos ferviente.
Pero la mujer vio que había llegado
su oportunidad.” –El Deseado de Todas las Gentes, pág. 367.
UNA GRAN FE
7.....¿Qué había tras su argumento respetuoso y cortés
perseverancia?
Mateo 15:27.- Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun
los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.
“Bajo la aparente negativa de Jesús, vio una compasión que él no podía ocultar. “Sí, Señor contestó; más los perrillos comen de las migajas
que caen de la mesa de sus señores.” Mientras que los hijos de la casa comen en la mesa del padre, los perros mismos no quedan sin alimento.
Tienen derecho a las migajas que caen
de la mesa abundantemente surtida. Así que mientras muchas bendiciones se daban a Israel, ¿no había también alguna para ella?
Si era considerada como perro,
¿no tenía, como tal, derecho a una
migaja de su gracia? “En este caso, Cristo
se encuentra con un miembro de una raza infortunada y despreciada, que no había sido favorecida por la luz de
la Palabra de Dios; y sin embargo esa
persona se entrega en seguida a la divina influencia de Cristo y tiene fe
implícita en su capacidad de concederle el favor pedido. Ruega que se le den las migajas que caen de
la mesa del Maestro. Si puede
tener el privilegio de un perro, está dispuesta a ser considerada como tal.
No tiene prejuicio nacional ni
religioso, ni orgullo alguno que influya en su conducta, y reconoce
inmediatamente a Jesús como el Redentor y como capaz de hacer todo lo que ella
le pide.” –El Deseado de Todas las Gentes, pág. 367.
8.....¿Qué vio Jesús en la petición de esta mujer? ¿Cómo fue
recompensada por gracia su fe fuerte y constante?
Mateo 15:28.- Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh
mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y su hija
fue sanada desde aquella hora.
Marcos 7:29, 30.- (29) Entonces le dijo: Por esta palabra, ve; el demonio
ha salido de tu hija. (30) Y cuando llegó ella a su casa, halló que el demonio había
salido, y a la hija acostada en la cama.
“El Salvador está satisfecho. Ha probado su fe en él. Por
su trato con ella, ha demostrado que aquella que Israel había considerado como
paria(separada), no es ya extranjera sino hija en la familia de Dios. Y
como hija, es su privilegio participar de los dones
del Padre. Cristo le concede
ahora lo que le pedía, y concluye la lección para los discípulos. Volviéndose hacia ella con una mirada
de compasión y amor, dice: “Oh mujer, grande es tu fe; sea hecho
contigo como quieres.” Desde aquella hora su hija quedó sana. El demonio no la atormentó más. La mujer se fué, reconociendo a su Salvador
y feliz por haber obtenido lo que pidiera.” –El Deseado de Todas
las Gentes, pág. 367.
MEDITACIÓN
- ¿Te hubieras sentido rechazado e ignorado si estuvieras en el lugar de esta mujer?
- ¿Cómo hubieras actuado bajo circunstancias similares?
- ¿Prueba el Señor nuestra fe también?
- ¿Esperarías el mismo elogio por tu fe como recibió la mujer pagana?
ESTUDIO ADICIONAL
Profetas
y Reyes, pág. 356; Mi Vida Hoy, pág. 119.
“Muchos son los que, aunque se esfuerzan por
obedecer los mandamientos de Dios, tienen poca paz y alegría. Esa falta en su experiencia es el
resultado de no ejercer fe. Caminan
como si estuvieran en una tierra salitrosa, o en un desierto reseco.
Demandan poco, cuando podrían pedir mucho, por cuanto no tienen límite
las promesas de Dios. Los tales no representan correctamente la santificación
que viene mediante la obediencia a la verdad. El Señor desea que todos sus hijos sean felices, llenos de paz y
obedientes. Mediante el
ejercicio de la fe el creyente llega a poseer esas bendiciones. Mediante
ella puede ser suplida cada deficiencia del carácter, cada contaminación
purificada, cada falta corregida, cada excelencia desarrollada.” –Los Hechos de los
Apóstoles, pág. 450.
“El que es firme en la fe puede hacer
mucho bien; puede comunicar
bendiciones del orden más elevado a aquellos con quienes trata, pues la ley
de Jehová está en su corazón. Pero no
podemos asociarnos voluntariamente con los que están pisoteando la ley de Dios,
y conservar nuestra fe pura y sin mancha. Nos contagiará el espíritu de ellos y
a menos que los dejemos, quedaremos al fin vinculados con ellos, para compartir
su condenación.” –El Hogar Cristiano, pág. 416.
No hay comentarios:
Publicar un comentario